EL LIBRO DE EQUIS

PARTE 3: NIHILO

bootstrap html templates

CAPÍTULO 18 - NADA

Aquella repelente pareja se había sentado dos asientos delante, en la misma hilera que Equis. Estaban hablando y riendo, aunque no podía escuchar nada de lo que decían debido a los grandes auriculares que llevaba sobre la cabeza.

Equis estaba escuchando una lista de reproducción que había creado con música motivadora. En aquella playlist estaban todas las canciones que en algún momento le habían hecho sentirse bien. Así se olvidaría de la molesta pareja y además se cargaría las pilas para la noche de fiesta que le esperaba. Mientras tanto, iba mirando las calles de Madrid por la ventana de autobús.

Pasadas dos canciones, empezó a hacer efecto la inyección de buena música que se estaba metiendo. Como no pagaba por la app, no podía elegir qué canción escuchar, pero en aquella lista no había otra cosa que no fueran temazos que enamoraran a Equis, así que no había problema. Hasta el momento, le habían salido “let the good times roll” de Sam Butera y “Come on” de The Hives. A Equis le gustaba música muy variada y aquella playlist tenía todos los estilos posibles. El único requisito que tenía una canción para entrar era que le cargase las pilas al escucharla.

Cuando acabó la segunda, Equis estaba deseando ver qué temazo le tocaba a continuación. Sin embargo, lo que sonó fue aquella maldita grabación que tanto odiaba.

    - ¿No aguantas los anuncios? Hazte Premium y escucha tu música sin interrupciones – decía la voz de chico joven antes de dejarle veinte segundos esperando con una melodía de fondo.

Mientras tanto, Equis siguió mirando las calles de Madrid para entretenerse y no fijar su atención en la pareja. Se había puesto la música bastante alta, ya que eran muy ruidosos y la voz de ella era chillona a más no poder. Según acabó el anuncio de la aplicación de música, le siguió otro. Empezó a sonar el típico ritmo de reguetón que Equis había escuchado mil veces en mil canciones distintas y comenzó otra locución:

    - ¿Todavía no has escuchado lo nuevo de Papi Papito? No te pierdas al artista urbano que más está subiendo en las listas de éxitos...

Equis aguantó estoicamente el anuncio de un minuto. La maldita app siempre hacía lo mismo: te invitaban a pagar para no tener anuncios y luego te colaban uno, para que supieras lo que ganarías al hacerte “Premium”. A Equis le encantaba la música y le hubiera gustado poder pagar por aquella app, pero no era un gasto que pudiera permitirse, menos en un momento como aquel que no tenía casi ingresos y se estaba quedando sin ahorros. La única opción que tenía de evadir la publicidad de la app era bajar el volumen de su teléfono. Lo hizo.

Mientras esperaba, no pudo evitar mirar a la pareja que le había ralentizado en el cine. Eran jóvenes, quizás algo más que él y parecía que se lo estaban pasando en grande juntos. Equis pensaba que debían estar en ese momento en el que todo es maravilloso; ese en el que tú la quieres y ella te quiere; en el que creéis que eso vuestro es especial… Comenzó a visualizar a Eme en su mente.

Habían pasado más de dos meses desde la última vez que la vio. Al principio fue bastante duro, aunque lo peor lo había vivido en Tristitia y, después, cuando vio que había preparado toda aquella sorpresa para nada. Tras aquello ya no sentía pena cuando pensaba en Eme, sentía rencor. No era un sentimiento muy fuerte, pero existía. Sentía rabia por cómo había acabado todo.

En ese instante, Equis frenó sus pensamientos. Sabía perfectamente lo que pasaría si no lo hacía y no lo quería en absoluto. Esperó a que el anuncio terminase y volvió a subir el volumen. Por suerte para él, empezó a sonar “The wolf” de “Mumford and sons”, una canción que siempre le motivaba. Le siguieron otras muy dispares: primero “Song2” de “Blur” y después “Ningún hombre, ningún lugar” de “Xoel López”.

Tras esa última canción, Equis se había olvidado por completo de todo lo que había a su alrededor, incluida la pareja que estaba varios asientos por delante de él. Estaba totalmente inmerso en la música que escuchaba y ahora sí que le estaba empezando a hacer efecto la dosis de buenas canciones que se estaba metiendo. Hasta le estaba apeteciendo ir a su quedada con Pablo y los otros compañeros del cine... En realidad, cuando Pablo se lo propuso no le apetecía ir, como no le había apetecido absolutamente ningún plan desde que perdiera definitivamente a Eme. Sin embargo, en la última semana Equis notaba que, poco a poco, volvía a sentirse mejor y pensó que volver a salir por ahí de fiesta podía ser el broche que culminara su recuperación.

No quedaba mucho para llegar a Plaza de España, pero aún le daba tiempo a una última canción antes de bajarse del bus. Estaba deseando que le tocara “Your wish” de “Talisco”, que sabía que estaba en la playlist porque era de las últimas canciones que había añadido. Esa canción siempre le daba ganas de bailar y cantar.

No hubo suerte. Empezó a sonar una canción de Trap que no había oído en su vida. – Eso no lo he metido yo en la playlist – pensó. A los pocos segundos, se dio cuenta de lo que estaba pasando:

    - ¡MikiFlow, MalaRuina y muchos más artistas del Trap urbano en la nueva playlist “Todo Trap”! Escucha temazo tras temazo en...

Equis se quitó los auriculares mientras pensaba – ¡No me jodas, otro anuncio! ¡Por dios! – Sin embargo, se le escapó el “por dios” en voz alta. La pareja que tenía sentada dos asientos por delante de él miraron al unísono y acto seguido se miraron entre ellos y comenzaron a reír por lo bajo (o eso pensaban ellos). 

Se puso a mirarles mientras daba rienda suelta a sus pensamientos – Ahora todo es luz, pero ya veremos cuando toque construir algo juntos – pensó desde el rencor que sentía hacía sí mismo y hacia ellos por reírse de él.

    - Llegará un día – continuó – en el que uno de los dos sienta más que el otro. En el que esa persona dé más y no reciba lo suficiente. Siempre es así. Entonces uno se convertirá en servido y otro en sirviente; y llegará un día en el que se pondrá a prueba el amor del servido y tendrá que elegir si quiere servir también o cortar con la relación; y si es cobarde decidirá seguir como está; y si el sirviente no tiene el suficiente amor propio, aceptará seguir siendo sirviente ¿y sabéis qué pasará después? Que os estallará en la cara y lo acabaréis dejando. Y será extraño hablaros o escribiros ¡y ya ni te cuento sentaros así de juntos! Y sé que pensáis que a vosotros no os va a pasar, pero toda vuestra historia quedará en un ínfimo y frio recuerdo; y quizás ni eso.

Volvió a pensar en Eme. Ya no quedaba nada de la relación que habían tenido. Un mes y medio desde el último mensaje y dos desde la última vez que la vio. Eso había sido suficiente para convertir una historia tan bonita en absolutamente nada.

El triste monólogo mental de Equis fue interrumpido porque la pareja se levantó para bajarse. Estaban en Gran Vía, lo que significaba que Equis se había pasado dos paradas. Durante todo ese rato se había olvidado de la app de música. El anuncio había acabado hacía bastante y, de hecho, habían sonado varias canciones que a Equis le hubiera encantado escuchar si no hubiera estado absorto en su mundo y sin los cascos puestos.

Antes de ponerse los auriculares de nuevo y levantarse para bajar del bus, Equis se permitió un último comentario en su mente, uno corto pero que expresaba perfectamente todo su universo interior. – ¡Bah! Nada…

18 – Nada

Fíjate en cómo pasa el tiempo
De repente, todo quedó en nada
Todos los mares, los vientos
Nuestros cuerpos contentos
Las caricias, las sonrisas, las miradas
Es como si cogieras algo
Y lo convirtieras en polvo
Como si ya no se acordara de mi rostro
Como si todo fuera en vano
Pero “nada” no es lo que valgo
Y aunque la tristeza me dé morbo
No dejo salir al monstruo
Ni a su miedo que es insano
¿Que ya no vamos de la mano?
Bueno, esa fue su decisión
O algo así por el estilo
Diremos que este cruel destino
Nos obligó a decir adiós
Y a distanciar nuestros caminos
Para que llueva, de seguido
Hasta que esté de vuelta el sol
Y volveré al tramo perdido
Ese que era de los dos
Y lloraré a moco tendido
Al ver que no hay camino
Y que de tanto que ha llovido
Si buscas por donde vinimos
Solo verás vegetación 

Diseño Capítulo 18 - Nada

¿TE GUSTA LO QUE HAGO?

Sí te gusta "El libro de Equis" puedes hacer todas estas cosas:

ÚNETE AL GRUPO DE FACEBOOK EN EL QUE COMPARTO TODO LO RELACIONADO CON EL LIBRO

SÍGUEME EN LAS REDES

Esta página web ha sido creada por Rafa Alday. 2019